¿Qué se esconde detrás de la idea de los “hombres de alto valor”?

Influencers como Andrew Tate o Amadeo Llados están tras el avance de este movimiento que rescata valores tradicionales y que van de la mano del avance de la ultra derecha en Internet

La ideología de los “hombres de alto valor” (o “high-value men”) ha ganado popularidad en los últimos años, especialmente a través de las redes sociales. Este concepto se basa en una combinación de ultraliberalismo, estereotipos tradicionales de masculinidad y una obsesión por la autodisciplina física y mental. Sería el reverso de las tradwifes.

Cuando pensamos en el discurso de “hombres de alto valor” seguramente lo que primero nos venga a la cabeza en España sea Amadeo Llados. Pero no deja de ser una burda copia del influencer anglosajona y boxeador Andrew Tate. Tate, que fue detenido en Rumanía por tráfico de personas y está acusado de violación, se dedicó en sus redes a promover una visión del éxito basada en la acumulación de riqueza, el poder físico y una confianza absoluta.

Se recuperan valores antiguos de la masculinidad

Entre sus seguidores, su detención no hizo que lo miraran con ojo crítico. Esto también es indicador de hasta qué punto este tipo de influencers toca la tecla de los chicos y hombres que se sienten apelados por su discurso.

Como decíamos, en España, Amadeo Llados destaca como uno de los principales defensores de esta visión. Llados, con millones de seguidores en redes sociales, vende una fórmula para el éxito que incluye riqueza, perfección física y atracción de mujeres según sus propios términos. Ofrece masterclasses y organiza eventos donde comparte sus estrategias para alcanzar una vida de lujo, centrada en la acumulación de riqueza, la autoconfianza y una imagen de éxito.

Recientemente Llados ha sido acusado de estar perpetrando conductas sectarias y que recrean el esquema de las estafas piramidales.

El auge del uso de esta etiqueta y concepto es un síntoma más de como el machismo reacciona ante el avance del movimiento feminista. Bajo una pátina de modernidad se recuperan valores antiguos de la masculinidad que parecían ya superados. Uno de los elementos destacables es que estos discursos ofrecen soluciones simplistas a problemas complejos y a menudo culpan a movimientos feministas y a cambios sociales por una supuesta pérdida de privilegios masculinos.

Como decíamos, se trata de la reacción del patriarcado ante la pérdida de privilegios y que debe entenderse dentro de un marco más amplio donde la alt-rigth y el ultraconservadurismo están extendiéndose sigilosamente en nuestras pantallas. Otro ejemplo de ello es la escena de RoRo o Ballerina Farm.

La obsesión con el cuerpo perfecto y el éxito material, promovida por estas figuras influyentes, también ha sido criticada por su conexión con ideas extremistas y su potencial para fomentar el elitismo y el sexismo. La aclamada escritora y pensadora Naomi Klein ha argumentado que este tipo de ideologías pueden contribuir a un entorno en el que se valoran más ciertos atributos físicos y económicos sobre los humanos en su totalidad, lo cual puede llevar a formas de pensamiento excluyentes y elitistas.