Señales de que vuestra relación está perdiendo intimidad

Es imposible mantener el ritmo pasional del principio, pero una caída en picado tampoco es normal

Las relaciones sufren transformaciones conforme transcurre el tiempo: pensar que podéis mantener la misma intensidad que durante los inicios durante años y años es una ingenuidad que os conducirá a la decepción y a la frustración. No obstante, el hecho de que sea totalmente natural que vuestra pasión se resienta un poco no significa que sea normal que vuestra intimidad se encuentre en un estado moribundo. Eso suele ser síntoma de que las cosas no van nada bien. En líneas generales, percibirlo desde dentro suele ser más complicado de lo que parece, por lo que la psicoterapeuta de parejas Randi Gunther ofrece en un artículo para Psychology Today varias señales con las que identificarlo.

Comenzando por la distancia personal. Puede parecer algo aparentemente nimio, pero si no soléis buscar la proximidad física, si mantenéis la distancia dentro de una misma habitación, probablemente vuestro vínculo no esté en su mejor momento. Y muy conectado con esto está otra señal clave según esta experta: el grado de contacto físico. En sus propias palabras, “cuando el tacto disminuye, también lo hace una conexión sexual mutuamente satisfactoria”. El hecho de que no deseéis nunca ese contacto, ya sea con fines cariñosos o con fines sexuales, demuestra una falta de interés muy significativa entre vosotrxs. Se está abriendo un abismo separador día tras día.

Además, escribe Gunther, la falta de paciencia, la abundancia de comentarios negativos, el desinterés en el estado de la otra persona y la falta de entusiasmo en los saludos tras un tiempo separadxs también suelen aparecer conjuntamente con la desintegración de la intimidad. Viene motivado por una creciente indiferencia que muchas veces pasa desapercibida incluso para quien la experimenta. En otras ocasiones, existen tales señales de apatía que resulta inevitable percatarse: la falta de ofertas de atención, la falta de priorización absoluta y la evitación son demasiado claras y dañinas para la otra persona como para que pasen desapercibidas.

Por último, Gunther habla de una señal que suele ser bastante reveladora: el interés constante en experiencias lejos de la pareja. “Incluso cuando el romance es nuevo, las parejas no siempre quieren hacer las mismas cosas al mismo tiempo, pero priorizan las cosas que pueden compartir y priorizan esos momentos todos los días”. En este sentido, agrega, “la intimidad falla cuando cualquiera de los dos comienza no solo a pasar más tiempo lejos del otro, sino a encontrarse más energizado y satisfecho cuando esto sucede”. Pero ojo: no es un checklist para tomarse a la ligera. Debes analizar si muchas de estas señales se mantienen en el tiempo. En caso afirmativo, necesitáis una conversación.