Europa está envejeciendo. Y mucho. En principio, se trata de una buena noticia: significa que en la actualidad ha aumentado la esperanza de vida de la población. No obstante, hay una lectura más dramática: la pirámide demográfica está trastocándose y, si la cosa no cambia, si no hay más jóvenxs disponibles para trabajar y cotizar, el Estado social del bienestar del que disfrutamos podría verse amenazado, y especialmente el sistema de pensiones. Visual Capitalist, utilizando datos proporcionados por la CIA, ha elaborado un mapa con la edad media de los diferentes países del mundo que refleja perfectamente la crisis de natalidad que sufre el continente.
De los diez países más envejecidos del mundo seis se encuentran en Europa: Grecia, España y Alemania con una edad media de 47 años, Italia con una edad media de 48 años, Andorra con una edad media de 49 años y Mónaco con una edad media de 57 años, lo que le convierte en el país más envejecido de todo el planeta. El top diez lo completan San Pedro y Miquelón (51 años), Japón (50 años), San Bartolomé (47 años) y Hong Kong (47 años). Además, escriben desde Xataka, países como Croacia, Estonia, Austria, Ucrania, Hungría, Bosnia, Bulgaria, Lituania, Letonia, San Marino, Portugal o Eslovenia también están entre los primeros con una población de entre 45 y 46 años.
Ni poblaciones muy jóvenes ni muy envejecidas
Pero el otro extremo tampoco es celebrable. Sí, una población joven insuficiente impide pagar las pensiones de los más mayores y enfrentar los gastos habituales de un estado, pero una población excesivamente joven es indicativo generalmente de una baja esperanza de vida. Es lo que ocurre con los países ubicados en el top diez de países más jóvenes del mundo, todos ellos ubicados en África: Burundi (18 años de media), Guinea-Bisáu (18 años), Mozambique (17 años), Benin (17 años), República Democrática del Congo (17 años), Chad (17 años), Mali (16 años), Angola (16 años), Uganda (16 años) y Níger (15 años). Mucha natalidad y mucha mortalidad. Una triste realidad.
En este sentido, el mapa de Visual Capitalist demuestra que la humanidad enfrenta dos problemas. Por un lado, muchos países continúan en una situación precaria que lleva a sus ciudadanos a vivir vidas mucho más cortas que en otros rincones del globo. Por otro lado, los países más desarrollados carecen cada vez más de los recursos humanos necesarios para pagar su sistema de bienestar. “El foro Económico Mundial presentó un revelador estudio llamado Viviremos hasta los 100 años: ¿cómo podremos pagarlo?. La cuestión es compleja. Mientras tanto, que a nadie se le ocurra decir en Europa que lxs inmigrantes sobran. Porque no es verdad: les necesitamos más que nunca.