España es uno de los países con más lugares declarados patrimonio de la humanidad por la Unesco del mundo entero. El hecho de que hayan pasado tantísimas culturas por aquí nos ha legado infinidad de edificios, pueblos y barrios espectaculares: tartesios, fenicios, íberos, celtas, griegos, romanos, visigodos, bizantinos, árabes, bereberes... La lista de civilizaciones que han pisado la península ibérica es tremenda. Como su influencia en la España que tenemos hoy. De todos sus rincones, de todos los kilómetros cuadrados que la componen, hay unos cuantos que destacan especialmente debido a su belleza tan particular. Barrios de una singularidad mágica que tienes que conocer.
Como el barrio del Albaicín en Granada. Situado a más de 700 metros del nivel del mar, con unas vistas privilegiadas a la Alhambra, con sus mil y una calles estrechas y blancas y con un inconfundible alma flamenca, es uno de los microlugares más espectaculares de nuestro país. No es extraño que quienes nacen allí presuman tanto de ello. Merece cada palabra buena que se le dedique. También en el sur, también con un aire muy andaluz, también lleno de flores, está el barrio de La Judería de Córdoba, otro rincón que parece en cierto sentido congelado en el tiempo y desde el que puedes visitar muy fácilmente la Mezquita-Catedral de la ciudad. En primavera luce aún más.
Y de ahí al centro del país. En Madrid, por ejemplo, está el mítico Barrio de las Letras, donde residieron algunos de los literatos más célebres del Siglo de Oro de las Letras Españolas como Lope de Vega, Miguel de Cervantes, Luis de Góngora o Francisco de Quevedo. Hoy no tiene tanta pluma excelsa habitando sus calles, pero conserva una hermosura típicamente madrileña que enamora. Y no muy lejos de ahí, a un ratito en tren o en autobús, tienes el Casco Histórico de Toledo, la llamada ciudad de las Tres Culturas, donde literalmente te sientes dentro de una obra de teatro. En este sentido, y aunque lindísimo, se echa de menos una mayor sensación de barrio y vida cotidiana.
Ya en el tercio norte de España, y según cuentan desde Trendencias, lo más destacable son el barrio de Cimadevilla en Gijón, el Caso Viejo de Santiago de Compostela y la Ciudad Vieja de A Coruña. Son alrededor de 1.000 kilómetros los que separan estos rincones de los barrios del sur mencionados anteriormente, pero parecen mundos diferentes. Aquí vibran otros colores muy típicos del Cantábrico, otro estilo para sus plazuelas y una predominancia de las fachadas en piedra sobre las fachadas blancas clásicas de Andalucía. Lo que demuestra que la variedad de culturas española es por encima de toda una bendición. Nos proporciona un país lleno de barrios top.