Crisis de fertilidad masculina: la donación de semen como solución

Donar semen es un proceso anónimo, confidencial, rápido y sin tratamiento, que cambia vidas

La infertilidad no deseada es uno de los principales desafíos a los que deben enfrentarse las parejas. En concreto, y según datos recopilados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 9% de las parejas tienen problemas de fertilidad y, al menos en un 30% de los problemas de fertilidad se deben a factores masculinos. Unas circunstancias que, en algunos casos, derivan de un estilo de vida poco saludable marcado por la mala alimentación, el sedentarismo y el estrés, pero otras veces de factores mucho más complejos que imposibilitan la fertilidad. Es ahí donde entra en escena la donación de esperma.

Donar semen es un acto solidario con otras personas, además, es un gesto anónimo y rápido, que no requiere tratamiento. Porque para esos miles de parejas la donación representa un antes y un después. Y esto mismo ocurre con las mujeres solteras o con las parejas del mismo sexo que quieren disfrutar juntas de la maternidad. En cierto sentido, tu donación funciona también como muestra de apoyo a una sociedad más moderna y donde existen otros modelos de familia distintos a los tradicionales.

¿Que qué requisitos se tienen que cumplir?

Según cuentan desde IVI DONO, clínica líder tanto en donantes de esperma como en servicios de reproducción asistida, el punto de partida es tener entre 18 y 40 años, encontrarse en buenas condiciones psicofísicas y no tener antecedentes genéticos. A partir de ahí, cambiarle la vida a una persona es muy fácil: acudes al centro, tienes una sencilla entrevista con un especialista, hacen una prueba rapidísima de la calidad de tu semen y finalmente realizas un test psicológico. Sin más complicaciones.

Uno no tiene que someterse a ningún tratamiento farmacológico para convertirse en donante de esperma. La cosa es mucho más natural. Y muy flexible. Se acude a la clínica IVI DONO más cercana una vez a la semana para realizar las donaciones, pero respetando el calendario personal para que no afecte a la vida cotidiana. Son solo quince minutos. Es el tiempo que cuesta contribuir de una manera tan directa a la felicidad de lxs demás. Y con la absoluta seguridad de que los datos personales son 100% confidenciales y la donación anónima. Es un imperativo de la Ley de Reproducción Asistida vigente en nuestro país.

Miles de donantes ya han pasado por las clínicas IVI DONO para poner su granito de arena y ayudar a esas personas que tanto lo necesitan.

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